La joven politécnica explicó cómo remover la pulpa de la fruta manualmente, la trituración de ésta, y la conservación de una mermelada que, al proporcionar valor agregado, generará ganancias de hasta 400 por ciento respecto a la inversión inicial, y que constituye la base del proyecto productivo que cuatro brigadistas idean para el municipio de Escuinapa de Hidalgo, Sinaloa.
La finalidad de este trabajo es que se comercialicen subproductos posteriores a la cosecha, como mangos en almíbar, dulces deshidratados y nieves, entre otros, para que la población de escasos recursos, principalmente las mujeres, tenga independencia económica y se conviertan en emprendedoras.
“Me encanta trabajar en comunidades, porque es muy padre ver cómo las personas aprenden de cosas que a primera vista pueden ser muy simples y que les ayuden a mejorar sus condiciones de vida”, señaló Samanta Gutiérrez.
Para Lidia Guadalupe Amparo Guzmán, ama de casa y quien ha trabajado en una de las empacadoras del lugar, la propuesta de los politécnicos es interesante porque aprende y le da la oportunidad de obtener recursos económicos.
El presidente municipal, Hugo Enrique Moreno Guzmán, explicó que el proyecto pretende aprovechar la fruta que actualmente se desperdicia, y que se estima es la mitad de las 360 mil toneladas de la producción anual generada por Escuinapa y Rosario, municipios líderes del sector en el estado.
Asimismo, recordó que México es el quinto productor de mango a nivel mundial. De acuerdo con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), la obtención de esta fruta aumentó 36 por ciento en el país, al pasar de 1.3 a 1.8 millones de toneladas; además, esta se ha logrado comercializar a 27 naciones, como Estados Unidos, Canadá, Rusia, Australia, Noruega, España, Italia y Reino Unido.
No obstante, dijo, en el municipio existen otros alimentos cuyo aprovechamiento podría optimizarse, tal es el caso del coco, del que existen 30 mil plantas. Además del chile, cultivo que ocupa 15 mil hectáreas, por lo que está la oportunidad de continuar el trabajo con el Politécnico para desarrollar más proyectos productivos.
Por otro lado, un grupo de brigadistas politécnicos, compuesto por tres topógrafos, tres ingenieros civiles y dos arquitectos, trabaja en el levantamiento topográfico y diseño del parque lineal y corredor turístico de la vialidad de acceso, en el tramo comprendido entre la autopista Mazatlán-Sinaloa y el Hospital General, con una longitud de mil 800 metros.
Salvador Ugalde Cortés, coordinador de la brigada e ingeniero civil, comentó que el objetivo del proyecto es que la comunidad del municipio tenga un espacio donde ejercitarse y a la vez se propicie la convivencia familiar. “La brigada pasada hizo mediciones e incluso entregó algunos planos digitalizados, nosotros estamos verificando esos planos y complementándolos”.
Una vez hecho lo anterior, los datos se usarán para crear una propuesta de diseño que tome en cuenta los espacios del carril peatonal, de la ciclopista y del arroyo vehicular, considerando el entorno del municipio para el mobiliario urbano y el alumbrado público, así como la necesidad de contar con cajas tormenta que recabarán agua de lluvia ante el problema de escasez que se registra en el lugar.
Aparte de estas dos acciones, la brigada conformada por 27 jóvenes lleva a cabo acciones de atención integral a la salud. También inició los proyectos de composta y huertos familiares en distintas localidades del municipio.