El secretario de la Comisión de Derechos de la Niñez expuso que aunque para los negociadores estadunidenses el fenómeno migratorio no debe estar en la agenda comercial, su presidente Donald Trump lo ha puesto como asunto crucial, “sin tacto ni cuidado adecuado con el país que tiene como socio comercial”.
En su opinión, “el tema de la migración es bilateral, está ligado al proceso productivo y es parte de la agenda integral, por ello, tendrá que ser parte de la agenda de renegociación bilateral”.
Indicó que de acuerdo con cifras oficiales, en el 2016 al menos 40 mil mexicanos fueron deportados de EU, y en cuanto a niñas y niños son casi 14 mil; de éstos, casi el 70 por ciento eran menores que se desplazaban solos.
Afirmó que el fenómeno migratorio es una responsabilidad de los países involucrados y es obligada su discusión, análisis y asumir compromisos para atender a la población que se ve involucrada.
De igual forma, las respuestas gubernamentales no deben ser represivas sino de carácter humanitario e integrales, ya que se trata de personas que abandonan sus países en busca de mejores oportunidades de desarrollo, huyen de la violencia y el crimen en sus regiones, entre otros factores, dijo Hernández Soriano.
En lo que se refiere a la responsabilidad de atender la migración en México, el secretario de la Comisión de Derechos de la Niñez indicó que desde el Congreso de la Unión se trabaja “para visibilizar el fenómeno” y anunció que se buscarán contactos con los funcionarios que representarán a nuestro país en la negociación del TLCAN para hacerles llegar las opiniones y observaciones de los legisladores.
En el Congreso pugnaremos porque haya la suficiencia en programas y recursos federales para atender a los miles de repatriados, muchos de ellos estacionados en la frontera norte, agregó.
El diputado federal del PRD reconoció que existen protocolos de atención a migrantes, pero desafortunadamente no se aplican, hay insuficiencia de personal para ponerlos en marcha y también se requieren albergues a cargo del gobierno.
Se hace el trabajo, pero con un déficit muy grande en cuanto al personal en campo. En agosto pasado se aprobó el protocolo para atender de forma integral a niñas y niños que viajan solos, pero si no hay agentes o personal de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, del Instituto Nacional de Migración y del Grupo Beta que lo apliquen en la frontera como se comprobó el año pasado, no sirven de nada, abundó.
Es obligado que el tema de la migración no sea excluido y forme parte de la renegociación del TLCAN, la delegación mexicana tiene la responsabilidad de ver por “nuestra niñez que está a merced del crimen organizado y otro tipo de explotación que en el país se sigue dando. Hay una población infantil en desamparo que espera la respuesta del gobierno”, concluyó Hernández Soriano.