Sugieren académicos seguir investigando sobre cambio climático con Trump o sin él

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Telma Castro, Francisco Estrada y Cecilia Conde, del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA); Carlos Gay, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático; y Enrique Martínez Meyer, del Centro del Cambio Global y la Sustentabilidad en el Sureste, consideraron que la inversión que destina el país a la ciencia es insuficiente, en particular la que se dedica a las ciencias de la atmósfera.

En el acto moderado por Mireya Ímaz, coordinadora del Programa Universitario de Estrategias para la Sustentabilidad, los especialistas hicieron un llamado a la comunidad científica para buscar mecanismos que permitan atraer apoyos económicos internacionales destinados a apoyar el desarrollo de la ciencia.

En México, dijeron, es reducido el número de investigadores que trabajan en un tema fundamental como es el cambio climático, por lo que consideraron imprescindible impulsar la formación de expertos en la materia.

Al respecto, Telma Castro, directora del CCA, expuso que en esa entidad académica los recurso económicos han sido insuficientes para forman investigadores que trabajen en el área y atiendan a un gran número de estudiantes interesados en realizar su servicio social.

Aunque, reconoció, últimamente se ha dado más apoyo, pues el cambio climático es un tema álgido y el país debe cumplir los compromisos establecidos con los Acuerdos de París. No obstante, prosiguió, “a veces creo que las metas no se verán cubiertas porque resultan complicadas y quizá queden en buenas intenciones”.

En su opinión, la llegada de Trump a la presidencia de Estados Unidos podría afectar los apoyos internacionales a la ciencia; además, añadió, “es lamentable que su presencia nos lleve a pensar que sí existe América Latina, aunque nuestra mayor participación es con colegas de EU, y utilizamos material y tecnologías que se desarrollan en esa nación. Es triste que no hayamos previsto este panorama”.

Cecilia Conde expuso que de cara a las elecciones de 2018, la UNAM tiene la capacidad de proponer a los candidatos de las diferentes fuerzas políticas un posicionamiento general encaminado al impulso de la investigación en cambio climático, entre otros asuntos relevantes.

Por otra parte, en el caso de que Trump decida eliminar los fondos a las diferentes agencias ambientales de su país, consideró que no sólo se restringiría el acceso de los investigadores mexicanos a las bases de datos internacionales, sino que se afectarían la movilidad estudiantil y académica hacia la Unión Americana y las fuentes de financiamiento directas.

Por ello, resaltó la necesidad de volver la mirada hacia Latinoamérica, reforzar la cooperación Sur-Sur y ver hacia Europa. “Ésta puede ser una alternativa de desarrollo un poco más libre”.

En su oportunidad, Carlos Gay afirmó que México y el mundo dependen de las bases de datos que se generan en EU –mismas que nos han permitido desarrollar investigación al mismo nivel– y las decisiones de Trump dejarían un vacío que debe ser cubierto. Una salida, propuso, es que el gobierno mexicano “se ponga las pilas” y aplique una mayor inversión a la ciencia, pero el resto del mundo también debe contribuir.

Al respecto, Francisco Estrada y Enrique Martínez coincidieron en que si Estados Unidos decide abandonar los Acuerdos de París habría un efecto dominó, pues otras naciones se irían, “aunque China y Europa tomarían el liderazgo”.

El gran perdedor, concluyeron, sería la Unión Americana, pues aunque no firmó el Protocolo de Kioto, ha sido un actor fundamental en los esfuerzos por mitigar el cambio climático a través de algunas regiones estadounidenses que han hecho valer su autonomía y, por lo tanto, sus leyes.