En reunión con la Comisión Especial de Seguimiento a lo ocurrido en Nochixtlán, presidida por el diputado del PRD, Omar Ortega Álvarez, el titular de la CNDH sostuvo que la integración del expediente “ha enfrentado diversas dificultades y representa varios desafíos, como la indebida preservación del lugar de los hechos, que motivó que no fueran resguardadas varias evidencias”.
Afirmó que “es incuestionable que los hechos no pueden quedar impunes y que la sociedad debe saber la verdad de lo acontecido en esa fecha, así como determinar quiénes tuvieron responsabilidad para que sean investigados y, en su caso, sancionados”.
Aseguró que se realiza una investigación con visión integral, objetiva y realista de lo ocurrido, con lo que “se ha documentado que hubo elementos de las corporaciones estatales que acudieron armados al inicio del operativo”.
Del cúmulo de información, análisis, cotejo y sustento de evidencias, se han determinado nueve aspectos, destacando que 25 de las 27 personas detenidas refirieron incomunicación, tratos indebidos, amenazas y presentaron lesiones, lo que está en investigación. Resaltó que de forma prioritaria se da atención integral a las víctimas.
El diputado Ortega Álvarez apuntó que, a ocho meses de esos lamentables acontecimientos, “por desgracia no tenemos hasta el momento un solo detenido; tampoco ninguna vía que nos dé luz para entender la problemática y, más aún, ahora hay agresiones y más amenazas de muerte tanto a las víctimas como a los familiares de las mismas y, al propio titular de la defensoría de los Derechos de Pueblos Indígenas en Oaxaca.
Por ello, es fundamental la presencia del titular de la CNDH en la Cámara de Diputados, para que señale los avances y explique a detalle cuáles son las recomendaciones o cuándo se podrán emitir las conclusiones y las consideraciones que tendrá que entregar a las diferentes autoridades, a fin de deslindar responsabilidades y saber con certeza cuáles fueron los lamentables hechos acontecidos en Nochixtlán, Oaxaca, precisó.
Refirió el cuestionamiento de los integrantes de la Comisión Especial a ese organismo nacional sobre las acciones que hace para garantizar que no se repita ese tipo de hechos y salvaguardar el respeto de los derechos humanos de todas las víctimas, así como determinar también la posible reparación del daño.
“Esto es importante, porque genera cierta incertidumbre para el pueblo mexicano que hasta el día de hoy no tengamos certeza, por lo menos, a través de una recomendación que dé luz de quiénes son los responsables de esos lamentables hechos, ni un solo detenido. No podemos seguir manteniendo la tesis de que fue una confrontación entre dos fuerzas, porque es insostenible, en cualquier lugar del mundo”, expuso.
Resaltó el compromiso de la Comisión Especial para contribuir a esclarecer los hechos mediante el seguimiento de los acontecimientos, por lo que es imprescindible conocer el avance del informe de la CNDH, para tener más elementos y conocer lo ocurrido.
Acciones realizadas por la CNDH
Al dar a conocer las acciones realizadas por la CNDH, hasta hoy, en torno al caso Nochixtlán, González Pérez señaló que el espectro de la investigación se amplió, ya que si bien el enfrentamiento inició en esa ciudad, los hechos de confrontación también se presentaron en las comunidades de Huitzo, Telixtlahuaca, Vigueras y Hacienda Blanca, por lo cual los visitadores adjuntos desplegaron sus actividades en esas zonas para recabar testimonios, solicitudes de información, peritajes, así como atender a víctimas y lesionados.
Informó que se han recabado 830 actas circunstanciadas, de las cuales 571 corresponden a los hechos suscitados en Nochixtlán, 43 a Huitzo y Telixtlahuaca, y 92 en Hacienda Blanca y Vigueras, que incluyen testimonios de familiares de fallecidos, testigos de los hechos, lesionados, detenidos, afectados por gases lacrimógenos, personas reportadas como no localizadas, afectados en sus bienes, personal de salud de instituciones públicas y médicos particulares, comerciantes y taxistas.
Asimismo, 124 actas de entrevistas y certificaciones médicas a elementos de Policía Federal, de la Agencia Estatal de Investigaciones y de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca que acudieron a los operativos, incluyendo mandos y policías lesionados, así como inspección de vehículos oficiales y depósito de armas.
En materia pericial, dijo que se han realizado inspecciones oculares y georreferenciación de lugares clave para la investigación, observación y fijación fotográfica de indicios balísticos, planimetrías de las zonas de los enfrentamientos (algunas con el apoyo de un dron); probables trayectorias respecto del lugar en que fueron lesionadas las personas que perdieron la vida y el lugar desde el cual pudieron provenir los disparos.
Se analizan 273 videos y 594 fotografías proporcionados por habitantes y recabados de medios de comunicación, así como de videos proporcionados por la Secretaria de Salud estatal, de las cámaras de seguridad del Hospital Básico Comunitario, del Centro de Salud con Servicios Ampliados de Nochixtlán y del Hospital de Huajuapan, que suman 59 horas, 27 minutos y 59 segundos de grabación.
Se cuenta con copia de la mayor parte de la carpeta de investigación de la PGR y sus acumulados. Precisó “que no se ha recibido copia de otras carpetas de investigación iniciadas por la PGR que, aunque están relacionadas con los hechos no se acumularon a la carpeta principal. Para un caso de esta envergadura resulta indispensable que las autoridades brinden a la CNDH, con oportunidad, toda la información que les sea requerida y que la misma se actualice cuando ello sea necesario”.
El titular de la CNDH apuntó que previo al operativo -4:30 am en el destacamento de la Policía Federal ubicado en San Pablo Etla- el Notario Público número 65 de la ciudad de Oaxaca sólo hizo un recorrido visual, sin verificar a detalle a los integrantes de las corporaciones policiacas y señaló: “sólo portan kit policiaco antimotines y no armas de fuego ni punzocortantes, sólo lanzadores simples de agentes químicos” asimismo, indica que inspeccionó los vehículos terrestres que tuvo a la vista, certificando que “en su interior no existían armas de fuego ni punzocortantes”.
Señaló que en total fueron ocho las personas fallecidas, seis en los hechos de Nochixtlán y una en Viguera en la Ciudad de Oaxaca; los siete fallecieron por arma de fuego. Una persona más fue lesionada un día después de los hechos por un cohetón y como consecuencia de ello falleció. Todas eran de sexo masculino, con edades que oscilaban entre los 18 y 39 años; ninguno era maestro.
Sólo en cinco de las siete personas fallecidas por arma de fuego fue posible recuperar algún elemento balístico (tres corresponden a arma larga calibre .223 y dos a arma corta calibre 9 mm).
En total hubo 190 personas heridas, de las cuales 122 fueron civiles y 68 policías. En el primer caso, 37 fueron lesionadas por arma de fuego; siete por impacto de cartucho de gas; 13 presentaron quemaduras, cuatro, fracturas; 37, contusiones y las 24 restantes las relacionó la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca sin precisar el tipo de lesiones.
De los 68 policías heridos, 43 son federales y 25 estatales; de ellos, un elemento federal y dos estatales fueron lesionados por arma de fuego, mientras que el resto lo fueron por quemaduras provocadas por cohetones y lesiones por contusiones.
Cerca de las 8:50 horas se reportó por radio al Centro de Mando de Policía Federal los primeros disparos y se solicitó apoyo. Al recibir una segunda llamada para pedir apoyo, el Grupo de Coordinación interinstitucional en Oaxaca decidió que personal de la División de Gendarmería de la Policía Federal acudiera en apoyo y rescate de los elementos que se encontraban en Nochixtlán y que algunos elementos fueron armados.
Entre las dificultades de las pesquisas, refirió las de acceso y movilidad dentro de las comunidades, lo que complicó realizar los estudios y dictámenes periciales necesarios para esclarecer los hechos; la existencia de contradicciones entre los diversos testimonios recabados, obligando a que se contrasten y confronten con otros elementos objetivos de convicción, a fin de dilucidar lo que realmente aconteció. Han sido múltiples las testimoniales recabadas de la población civil y policías, indicó.
Resaltó que otro inconveniente es que “algunas autoridades no den respuestas oportunas ni incluyan todo lo requerido en las solicitudes de información”, por lo que se les ha insistido sobre la necesidad de contar con los datos de manera oportuna e integra.“En estos ocho meses no ha sido fácil que nos proporcionen toda la información que requiere la CNDH”, aclaró.
