“Un escenario de esa índole abonaría a crear un ambiente de incertidumbre política en el país rumbo al 2018”, advirtió Zambrano.
El diputado federal indicó que el intento de anular el triunfo de Yunes pudiera iniciarse a partir de la resolución que tiene pendiente de emitir el Tribunal Federal Electoral tras las denuncias presentadas por el PRI en las elecciones del pasado 5 de junio. Dijo que el tema debió ser discutido la víspera y, sin embargo, está suspendido aunque expuso que no puede esperar, dado el relevo de magistrados electorales de la Sala Superior prevista el próximo 4 de noviembre.
“Pretender esas acciones sería llevar a un escenario de inestabilidad política y riesgo de gobernabilidad no sólo a Veracruz, sino al país entero”, alertó Zambrano.
El legislador indicó que si bien “los tribunales han anulado elecciones de gobiernos estatales con antelación; ello no ha ocurrido en escenarios como el que tenemos, que de por sí ya es turbio como para imprimirle más complicaciones”.
“Podrían estar en esa tentación; pero antes de hacerlo –aseveró- tienen que pensar que se acrecentaría el proceso de descomposición social”.
El legislador exhortó en cambio a que la Procuraduría General de la República (PGR) informe sobre los avances que lleva sobre el caso Duarte y que sigue a través de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales y la Agencia de Investigación Criminal, en coordinación con el Sistema de Administración Tributaria (SAT), toda vez que desde hace meses ha interrogado a familiares, colaboradores, empresarios y prestanombres que lo ayudaron a sustraer recursos públicos para su beneficio personal, pero no se ha sabido más que de la detención de algunos de ellos.
“A estas alturas, la PGR debe contar con progresos suficientes para actuar contra Duarte” dijo y demandó a la autoridad que tome las medidas precautorias necesarias para evitar que el gobernador “con licencia y fuero” se dé a la fuga o -cuestionó- si también para él esperará extender una “ficha roja”.
“No vayan a querer salir con que ‘no saben dónde está’ como está sucediendo con Padrés en Sonora y, de esa manera, tendríamos a dos ex gobernadores responsables de delitos, que huyeron de la justicia. Sería funesto para el país que quisieran llegar a algún acuerdo entre el PRI y el PAN para que las aguas estén tranquilas”, concluyó.
