En nombre del Grupo Parlamentario de Morena en la Asamblea Legislativa, la legisladora solicitó que dicha información tome en cuenta los feminicidios, la violencia sexual y las denuncias por desaparición de mujeres, además de la manera en que se aplican los protocolos de actuación sobre acoso sexual.
Las agresiones de índole sexual en contra de las mujeres son crecientes y cada vez más alarmantes, advierte la vicecoordinadora de la bancada parlamentaria. Por ejemplo, subraya, de acuerdo con la sección Mujeres México de la Organización de Naciones Unidas, nuestro país ocupa el sitio 16 en lo tocante a feminicidios en el planeta, en virtud de que en los últimos 25 años más de 35 mil mujeres fueron asesinadas por razones de género.
A pesar de la gravedad extrema de esta situación, México aún carece de la metodología para medir la incidencia de esta forma de violencia extrema contra las mujeres, toda vez que los sistemas actuales de información y registros administrativos no están diseñados para aportar con exactitud informes sobre este tipo de homicidios, señala Rojas Martínez.
Las cifras son reflejo puntual de los arteros crímenes, explica la diputada de Morena, pues en México cada día son asesinadas seis mujeres, y en 46 por ciento de los casos de forma especialmente brutal, como por apuñalamiento, quemadura, estrangulamiento o golpes, mientras 16 por ciento fueron abatidas a balazos. Por increíble que parezca, dice Beatriz Rojas, en el 38 por ciento de los casos las autoridades ni siquiera se molestaron en dictaminar cuáles fueron las causas de los homicidios.
La espiral de la violencia ejercida en contra de mujeres tiende a elevarse, agrega la legisladora: mientras de 2007 a 2012 se perpetraron mil 909 feminicidios, cifra exagerada de por sí, de 2011 a 2014 dicha tasa se incrementó de 2.4 a 3.2 por cada cien mil mujeres. En el lapso comprendido entre 2012 y 2013 continuó el lúgubre ascenso estadístico, recalca Rojas Martínez, toda vez que fueron asesinadas 3 mil 892 mujeres. Además, de acuerdo con el Observatorio Nacional del Feminicidio, sólo 613 de estos casos fueron investigados y, peor aún, únicamente 1.6 por ciento de los homicidas recibieron sentencia.
En lo que respecta a la Ciudad de México, la situación es también lamentable, en virtud de que en el periodo comprendido entre 2013 y 2015 fueron victimadas 402 mujeres, tres cada semana, y la cifra no ha dejado de aumentar desde hace una década. Tan sólo en el mes de marzo, indica la legisladora, se registraron siete feminicidios. En estos casos, los cuerpos de las mujeres acusaban signos de abuso sexual y fueron expuestos en la vía pública.
Son innumerables los feminicidios cometidos a lo largo y ancho de la capital, dice Rojas Martínez. Ocurren en el propio Centro Histórico, en las delegaciones Magdalena Contreras, Xochimilco, y qué decir de Gustavo A. Madero, en donde la violencia de todo tipo es imparable, en Azcapotzalco, en toda la Ciudad de México, reitera la diputada. Apenas el martes pasado se registró un feminicidio más, esta vez en una barranca de la tercera sección de Chapultepec, en un sitio conocido como la Presa Tacubaya. Ahí se encontró, explica la legisladora, el cuerpo desnudo de una joven de aproximadamente 18 años, en estado de descomposición.
Debido a este alarmante clima de violencia en contra de las mujeres, desde el pasado 29 marzo solicitamos a la Procuraduría General de Justicia capitalina informar a la Asamblea Legislativa sobre las investigaciones en torno de este ilícito, pero jamás recibimos respuesta alguna. Hoy, ante el mutismo de esa dependencia a nuestra demanda, de nueva cuenta le exigimos al procurador Rodolfo Ríos Garza informarnos de manera inmediata sobre el estado que guarda el sistema de registro de los delitos de género, desagregados en feminicidios, violencia sexual y denuncias por desaparición, y cómo se aplican los protocolos de actuación para el acoso sexual, concluye la vicecoordinadora del Grupo Parlamentario de Morena.