Ante esto, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) promueve programas sociales que ponen énfasis en las mujeres, en el marco de respeto a sus derechos y con un enfoque de género, tales como la inclusión laboral, educación, cultura, cuidados y prevención del maltrato, entre otros.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo), México tiene 12.9 millones de personas adultas mayores, de las cuales 46.2 por ciento son hombres y 53.8 por ciento son mujeres.
Diversos estudios confirman que en México las mujeres viven en promedio 6 años más que los hombres, pero también son ellas las que, además de tener a cargo las labores del hogar, asumen más tareas de cuidado de adultos mayores, ya sea en la familia o como parte de una actividad adicional.
De acuerdo con el Conapo, en 2030 el país tendrá una población potencial de 20.4 millones de adultos mayores, lo que representaría el 15 por ciento de la población total.
La población adulta mayor es un grupo heterogéneo con necesidades y características diferentes. Cabe señalar, que el proceso de envejecimiento en México no se produce de manera uniforme, es decir, no se comporta igual en todas las regiones.
Por ejemplo, las entidades federativas que presentan más concentración de personas adultas mayores son: Estado de México, Ciudad de México y Veracruz. En contraste, Baja California Sur, Colima y Campeche concentran una menor población de personas adultas mayores, es decir, en términos de edad de sus habitantes, son estados “más jóvenes”.
Entre las estrategias que aplica el Inapam para atender los diversos aspectos derivados del envejecimiento están: el fomento de la actividad en este grupo social, proporcionar atención integral, por medio de Centros de Día, cuidados domiciliarios y favorecer el acceso en inmuebles por medio del diseño de modelos arquitectónicos amables con este grupo, así como la atención basada en el perfil de estas personas.
Otros esquemas puestos en marcha por el Inapam son: la promoción de un envejecimiento activo y saludable, mejorar su estilo de vida y fomentar programas de educación y cultura, así como abrir espacios para oportunidades laborales y de seguridad social y de ahorro.
Como parte de las actividades de rectoría establecidas por la Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores, se creó el Registro Único Obligatorio de Instituciones Públicas y Privadas de Atención a Personas Adultas Mayores. De 2014 a la fecha, se han registrado 2 mil 484 instituciones de ese tipo y en 2015 se realizaron 296 visitas de inspección en cumplimiento de ese artículo.
