“Me resulta insuficiente que el Presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza urja a la Suprema Corte de Justicia de la Nación a que le dé trámite preferente a las acciones de inconstitucionalidad de los gobernadores de Chihuahua, Quinta Roo y Veracruz por excederse en el paquete de leyes del Sistema Nacional Anticorrupción, ya que en el caso de los ex gobernadores de Tamaulipas la corrupción priista es evidente y resume todo lo que ha sido el partido oficial en todo este tiempo”, agregó.
Aseguró que la solicitud de Ochoa Reza será una auténtica pantomima si no hay congruencia y seriedad en sus actos, pues todos conocen de la corrupción galopante que gestan y operan los gobernadores priistas en todos sus estados y no hay autoridad federal que les ponga freno.
De acuerdo al artículo 5 de la Ley Orgánica de la PGR, esa dependencia está en condiciones de ofrecer una recompensa para conocer el paradero de los ex mandatarios de Tamaulipas Tomás Yarrington y Eugenio Hernández quienes se encuentran prófugos de la justicia por acusaciones realizadas por la Corte federal en Brownsville, Texas, por haber permitido el libre tránsito de estupefacientes, sobornos y lavado de dinero a los cárteles del Golfo y Los Zetas, bajo el expediente criminal B-12-435-S1 y los acumulados.
“Un auténtico crimen es el narcotráfico que asesina a nuestros jóvenes e inocentes, por eso yo invito al señor Ochoa Reza a que se una a la solicitud que planteo para que la PGR ofrezca una recompensa que permita dar con el paradero de los narco gobernadores del PRI y así demostrar que no hay solo una pose mediática en su proceder”, precisó.
“En todo el país no se ha dejado de hablar de los excesos de corrupción y megalomanía de los gobernadores de Chihuahua, Quintana Roo y Veracruz a quienes les aseguramos que muy pronto los alcanzará el brazo de la justicia, pero no podemos ser omisos a los otros casos en los que el PRI no quiere voltear hacia el pasado, pero lo vamos a obligar con la ley en la mano”, finalizó.