Planteó que dichas acciones deben orientarse a garantizar la reinserción social y evitar la reincidencia de los menores de edad.
Lamentó que a nivel institucional y social se carezca actualmente de programas que atiendan las necesidades de los adolescentes en conflicto con la ley, “están completamente olvidados por las instituciones gubernamentales y civiles que deberían estar trabajando de forma integral contra la reincidencia y lograr su reinserción social”.
Alertó que al abandonar los centros tutelares, los adolescentes sufren una serie de exclusiones que les impiden crear formas diferentes de vida, “y si regresan a una familia donde a diario sufren de maltrato y violencia, sin oportunidades de estudio ni trabajo, entonces vuelven a enfrentar los factores que los orillaron a delinquir”.
López Campa aseguró que a esta exclusión por parte del Gobierno, se suma una estigmatización a nivel comunitario, “es un tema que se encuentra totalmente en el olvido”, remarcó.
Al respecto, coincidió en la necesidad de crear conciencia sobre la importancia de trabajar con este sector de la población y de brindarles una segunda oportunidad.
Adelantó que en el Presupuesto 2017 para la Ciudad de México, Movimiento Ciudadano impulsará recursos suficientes para concretar el vínculo que debe existir entre instituciones, asociaciones y comunidad, a efecto de dar seguimiento al proceso de reinserción de los menores infractores.
Asimismo, celebró que la Diputación Permanente aprobara por unanimidad el punto de acuerdo que presentó para exhortar al Gobierno de la Ciudad de México a que establezca una política en favor de los adolescentes, en especial de las mujeres entre los 12 y 20 años de edad, a fin de elevar su nivel de vida.
Al respecto, reveló que de acuerdo a cifras del Consejo Nacional de Población (CONAPO), existen en el país cerca de 5 millones y medio de mujeres adolescentes de 15 a 19 años de edad, por lo que demandó a las autoridades locales y federales a reflexionar sobre la importancia de fortalecer el plan de vida de ese sector de la población a través de la educación, servicios de salud, equidad de género, desarrollo de capacidades y atención en materia de salud sexual y reproductiva.
Ello bajo la premisa de que cuando un país invierte en la salud y la educación de su juventud, en especial de sus adolescentes, y además se crean las oportunidades para que alcancen su pleno potencial, impulsa el crecimiento económico para abatir la pobreza, “cabe destacar que en la Ciudad de México se concentra el 7.2% de la población de jóvenes en México”.
El líder de la bancada de MC en la Asamblea Legislativa lamentó que no sólo persistan los índices de pobreza, sino que la desigualdad económica se ha ensanchado. Acusó que tampoco se cuentan con mejores servicios públicos ni con una educación de mayor calidad.
Indicó que el número de dependientes económicos por población en edad de trabajar es hoy la mitad de lo observado hace 40 años y sólo restan 10 años más antes de que la tasa de dependencia empiece a subir por el proceso de envejecimiento.
“Por ello, tenemos que idear formas innovadoras para aprovechar los 10 años que nos quedan de bono demográfico y crear un posible bono de género, el cual resultaría de la mayor participación laboral de las mujeres”, puntualizó.
