Al respecto, Martha Singer Sochet, profesora de la misma entidad, consideró que si se desea un escenario diferente en los próximos comicios es preciso contar con reglas que permitan orden y espacio para expresar la diversidad.
La derrota del PRI en muchos de sus bastiones se dio y no fue porque hubiera un proyecto alternativo, mientras que las izquierdas ganadoras no obtuvieron triunfos absolutos, pero vieron un crecimiento notable, como Morena, con una presencia electoral destacable no sólo en la Ciudad de México, sino en estados como Oaxaca, refirió la universitaria.
En rueda de prensa, los académicos universitarios enfatizaron la necesidad de abrir los medios de comunicación al debate de la agenda electoral a fin de conocer cada propuesta, sea de candidatos independientes o de partidos políticos.
En la medida en que lo hagamos veremos fenómenos interesantes e incluso se podrán advertir cambios de postura en la población y habría fuerzas emergentes y nuevos liderazgos, hoy muy limitados, subrayó Figueroa Fernández.
El domingo se registraron fenómenos interesantes, porque quienes acudieron a las urnas vieron en las boletas una esperanza que generalmente tiene que ver con votar contra el partido gobernante, como en Chihuahua, donde —al igual que en otros estados— se ejerce el poder con amplios márgenes de impunidad, indicó.
Esto demuestra que aún con la crisis en el rubro y los problemas de representación, la gente sí sale a sufragar en busca de cambios en las condiciones del país, destacó el académico.
En este marco, los partidos tienen una excelente ocasión para reflexionar sobre cómo establecer proyectos con sentido para la ciudadanía, en un momento de crisis democrática tan importante como la actual, explicó.
De este modo, hacia los comicios de 2018, estas fuerzas recompondrán sus estrategias, pero sobre todo deberán replantearse el tipo de alianzas a establecer, expuso.
Para Singer Sochet, las elecciones del 5 de junio muestran un panorama crudo de la realidad política y social del país. “Se trata de un escenario en donde hemos visto que las propuestas de los partidos giran en torno a temas y asuntos alejados de los intereses de la mayoría”.
Este proceso electoral nos muestra que, por un lado, están los reclamos ciudadanos, y por otro el interés de estas entidades en allegarse votos para alcanzar el poder con fines distintos a la representación de la sociedad, resaltó.
En los últimos años, apuntó, las campañas en México se han caracterizado por estar vacías de contenido, débiles en atender las demandas sociales y “este domingo tuvieron algo en común a lo largo y ancho del país: no debatir temas de profundidad, sino buscar elementos para echar atrás lo depositado en las urnas”.
Los partidos están más interesados en discutir su supervivencia, debatir sus presupuestos y negociar su cuota de poder, y no en atender los reclamos sociales; de modo que volvieron a ser elecciones centradas en personas y no en iniciativas, dijo.
Finalmente, sobre la elección de la Asamblea Constituyente de la CDMX, los investigadores consideraron evidente la ausencia de participación y esto se debió, esencialmente, a la falta de información sobre este proceso hacia los ciudadanos.