El conocimiento, expuso, se duplica cada dos o tres años y cada día se publican unos siete mil artículos científicos o técnicos y la información que emiten los satélites alcanzaría para llenar 19 millones de tomos cada dos semanas.
“La velocidad con la que se genera la información y la innovación es de tal magnitud que obliga a reflexionar sobre la vigencia y eficiencia de nuestras prácticas educativas.
“Necesitamos adecuar la función docente a los nuevos tiempos, recrear estructuras, formas de aprendizaje, proyectos curriculares, procedimientos y estrategias pedagógicas. No será sencillo, pero la Universidad sabrá atender estas demandas”, afirmó al participar en la entrega del Reconocimiento al Mérito Académico que la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM (AAPAUNAM) hizo a 36 profesores.
Ante este reto, enfatizó el rector, el Plan de Desarrollo Institucional (PDI) 2015-2019 –sometido a consulta del 18 de enero al 29 de febrero y donde se reestructuró– contiene 17 programas estratégicos, 119 líneas de acción y 584 proyectos que incluyen acciones encaminadas a la formación y actualización de los maestros, así como al merecido reconocimiento de sus labores extracurriculares, que realizan para la modernización tecnológica y educativa.
Durante la consulta, agregó, el sitio del PDI recibió 92 mil 59 visitas; se enviaron ocho mil 452 opiniones y propuestas, 230 documentos y 85 correos electrónicos con aportaciones a los programas y proyectos. De éstos, sólo el 11 por ciento no son factibles de realizar por razones normativas o del presupuesto con el que cuenta esta casa de estudios.
Hoy, la UNAM realiza un gran esfuerzo por mejorar la calidad de la enseñanza y de la investigación. Éste es el reto de nuestros tiempos, manifestó en la Casa Club del Académico.
Agregó que la administración central sabe que cuenta con los maestros para continuar haciendo una mejor Universidad, y los maestros deben saber que cuentan con la Rectoría.
Graue también reconoció la labor de cerca de 40 años de la AAPAUNAM y el trabajo tenaz que sus más de 28 mil profesores e investigadores afiliados realizan para que la Universidad cumpla con su principal misión: educar.
La responsabilidad de educar “recae en cada uno de nuestros académicos con el mismo peso y proporción. Tenemos la tarea de transmitir conocimientos en una dimensión ética que propicie la integración y compromiso social”, concluyó.