“Bajo esas consideraciones, se propone facultar a las autoridades federales en todo el país, en el ámbito de sus competencias, diseñar, implementar y difundir mecanismos de asesoría y orientación dirigidos a madres, padres y personas que ejercen la patria potestad, tutela o guarda y custodia para que lleven a cabo su responsabilidad de crianza sin justificaciones que limiten, vulneren o restrinjan el ejercicio de los derechos de las niñas, niños y adolescentes”, señaló la diputada Maricela Contreras Julián, del Grupo Parlamentario PRD.
Con esta propuesta presentada ante el Congreso de la Unión, se pretende reformar y adicionar el artículo 22 de la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (LGDNNA) para que sea deber del Estado coadyuvar con los padres, madres o representantes legales para que la crianza de niñas y niños se presente con un enfoque de derechos y no se argumente la autoridad ante ellos para ser objeto de maltratos físicos o psicológicos, atentando contra sus derechos fundamentales.
“Somos conscientes de que la crianza de niñas y niños recae principalmente en las madres y padres, o en su caso en representantes legales, así ha sido reconocido por la Convención de los Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas en el artículo 18; esa responsabilidad va ligada a la obligación de velar por el interés superior de la niñez y coadyuvar en todo para el desarrollo. En ese sentido, nuestra propuesta pretende prevenir la violencia intrafamiliar y que se convierta en una práctica para la formación responsable, al mismo tiempo, formar padres con nuevos patrones de conducta en su forma de crianza que elimine el castigo físico como alternativa”, acotó Contreras Julián.
Cabe señalar que en México se elevó a rango constitucional el principio del interés superior de la niñez y se publicó la LGDNNA en un esfuerzo para continuar con la progresividad de los derechos y evitar situaciones que pretendieran pasar como normales la vulneración en la esfera de los derechos de ese sector de la población, tanto en la aplicación de políticas, como en las legislaciones y en gran parte también dentro de la cultura de la sociedad.
En Jalisco se implantó el Programa Escuela para Padres y Madres, mediante el que se imparten sesiones y orientaciones, además de otorgar herramientas necesarias para lograr una convivencia sana y con valores en el núcleo familiar. Asimismo, en la Ciudad de México opera el Centro de Formación Docente y Escuela para Padres que busca capacitar a padres y madres de familia en la formación de niñas y niños a efecto de que estos sean críticos, participativos y tolerantes, que rechacen todo tipo de violencia y convivan de manera armónica; además se busca también capacitar a personal docente para que enfoquen su tarea en conocer mejor el manejo de las emociones y que permita, a través de la innovación, lograr mejorar la educación de niñas y niños.
Investigaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México, a través de la Facultad de Psicología, desarrollaron la Escuela para Padres con la finalidad de proporcionar herramientas para la crianza de niñas y niños, fomentando el respeto de sus derechos humanos.
“Instruir, dirigir y educar, se trata de ir formando actitudes, valores y conductas en una persona, a través del ejemplo en la convivencia cotidiana. Con esta propuesta, apostamos cambiar, tanto en padres e hijos, patrones de conducta en relación a la crianza, concluyó la legisladora.