En entrevista, la legisladora aseveró que lo único que va a causar es pauperizar el servicio porque, dijo, a final de cuentas le están dando entrada a todos los que están en el seguro popular, pero el IMSS y el ISSSTE no tienen la capacidad para recibirlos.
“En el seguro popular se tienen registrados más de 53 millones de personas, el IMSS dice tener 69 millones de afiliados y 12 millones el ISSSTE, es imposible que se pueda dar una debida atención”, acotó.
Explicó que en el 2013 la OCDE planteo que el sistema de salud mexicano tiene una serie de problemas al tener en promedio 1.2 camas por cada mil habitantes, cuando en promedio los países de la OCDE tienen 4.8 camas por cada mil habitantes.
Aunado a lo anterior, la diputada evidenció que hay un problema en el término de médicos, una falta de enfermeras, los servicios de salud son deficientes, hay aparatos muy avejentados, los edificios están descuidados y hay salas de urgencia donde la gente tiene que estar en el suelo porque no hay donde atenderlas.
“Esto muestra que el diseño del sistema de salud en México fue un fracaso, Zedillo lo modificó en un proceso de descentralización de los sistemas de salud que no funcionaron, se los dio a los gobiernos de los Estados y han ampliado la cobertura, en realidad el sistema de seguro popular cubre a los que antiguamente cubría la Secretaria de Salud, es la misma gata pero revolcada”, subrayó.
Damián González reiteró que con esta acción al gobierno federal no le interesa mejorar la atención a la salud, ya que sólo utiliza los recursos actualmente existentes, pauperizando la atención a los derechohabientes, porque el problema es que médicos y enfermeras en los sistemas de salud tienen una carga de trabajo tremenda y no tienen insumos.
“Para poder hacer la universalización de los servicios de salud también se necesita invertir en contratar mayor número de persona y no invertir solamente en términos de asociaciones público privadas, porque lo que quiere decir que están en un proceso de privatización tremendo”, expresó.
Para finalizar, la legisladora añadió que el año pasado al ISSSTE le recortaron 2 mil 500 millones de pesos, y que además al pensionissste no se le incluyó el dinero suficiente para funcionamiento, bajo el supuesto de que se iba a privatizar y que se iba a desincorporar este año.
“No hay presupuesto, el director general del ISSSTE asegura que tienen cubierto esos gastos, lo cual me parece bastante incongruente porque no vemos de donde puede ver mayores recursos; tenemos uno de los gastos más bajos en términos del PIB en términos de salud que esta alrededor del 6 por ciento, necesitaríamos aumentarlo a 11 o 12 por ciento, estamos hablando del gasto que se tiene actualmente para dar atención a toda la gente que se requiere”, finalizó.