Sin grandes asuntos que tratar, la sesión de la Cámara de Diputados se desbordó ayer en los dos grandes temas del momento:
Respecto del primer tema, el que ocupó los espacios y tiempos más importantes de los medios informativos aun por sobre las noticias derivadas de la visita del Papa Francisco, el que dio cuenta puntual del enfrentamiento de grupos rivales en el Penal de “Topo Chico”, en Nuevo León, con un saldo de 49 muertos y una docena de heridos graves, diputados de todas las fracciones coincidieron en responsabilizar al gobernador Jaime Rodríguez Calderón, mejor conocido como “El Bronco”.
En cuanto al segundo: el de la profunda descomposición social, económica y política de Veracruz una mayoría exigió la renuncia del gobernador Javier Duarte así como el envío inmediato por parte del presidente Enrique Peña Nieto de un Comisionado para la Seguridad y la Reconciliación en el estado, así como la integración de una Comisión de la Verdad que determine si la constante violación de Derechos Humanos durante la administración del mandatario saliente corresponde a una política dictada desde la oficina del gobernador.
En diferentes intervenciones desde la tribuna y en entrevistas o conferencias de prensa, coordinadores parlamentarios de todas las fracciones y diputados en lo particular, reiteraron que el estallido de la violencia ocurrido en “Topo Chico” era más que previsible.
El propio presidente de la Cámara de Diputados, el perredista Jesús Zambrano sintetizó lo ocurrido en el más popular penal de Nuevo León con una palabra: espeluznante.
Indicó que para nadie en México y fuera de él, hay dudas de que gran parte de las cárceles mexicanas, y en especial esas como la de “Topo Chico” son terrenos bajo el dominio de la delincuencia organizada y sus diferentes grupos, algunos mucho más que encontrados entre ellos.
Sabiéndolo, dijo, es evidente que hubo más que una excesiva confianza en el gobernador Jaime Rodríguez Calderón respecto de lo que podía ocurrir a interior de este penal.
Para Marko Cortés, coordinador de los diputados del PAN, no hay duda: el responsable directo de lo acontecido en “Topo Chico” es del gobernador Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”.
“El es el responsable de esta tragedia que dejó 49 muertos… es responsable porque ya había antecedentes de hechos de violencia en ese penal, entre esos grupo, y no se tomaron las medidas adecuadas para impedirlo.
Consideró que “El Bronco” es doblemente responsable, porque en lugar de gobernar y atender las cosas de su estado, anda apoyando campañas de otros candidatos independientes por todo el país.
“Es necesario que deje de andar haciendo lo que hace y que se dedique a trabajar en Nuevo León”.
Recordó que apenas hace unos meses hubo otro motín similar en el penal de Cadereyta con un saldo de más de 40 muertos y lesionados lo cual derivó en recomendaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
“La Verdad es que le ha quedado muy grande el saco y el cargo a Rodríguez Calderón”, afirmó el coordinador blanquiazul.
NECESARIO UN DESLINDE
Para los diputados del PRI, lo ocurrido en “Topo Chico” “un deslinde puntual de responsabilidades y que se dé parte y forme también parte de las investigaciones la Comisión Nacional de los Derechos Humanos”.
Al hablar a nombre de su grupo parlamentario, el vicecoordinador y vocero de los priístas, el yucateco Jorge Carlos Ramírez Marín dijo que lo que es claro es que existe una responsabilidad ineludible del gobernador Rodríguez Calderón.
“Yo creo que parte de su responsabilidad, sin duda, son los penales del estado, independientemente de quiénes sean los presos que están dentro.
“Por eso hemos pedido un deslinde puntual de responsabilidades porque lo que suele pasar cuando ocurren este tipo de tragedias es que todos vemos a quien apuntar con el dedo. Lo urgente aquí es deslindar responsabilidades y no solamente aprovechar el momento para hacer pronunciamientos políticos”.
Dijo que en este caso no es un tema presupuestal.
“Es un tema de organización. Son muchos los penales en los que conviven estos tipos de reos en condiciones en las que pueden efectivamente asegurarse que van a cumplir su condena sin que se violen los derechos humanos sin que ocurran este tipo de motines”, precisó.
COMISIONADO PARA VERACRUZ
En cuando a la profunda descomposición que enfrenta hoy Veracruz, la oposición en San Lázaro le exigió ayer al presidente Enrique Peña Nieto el envío urgente de un Comisionado para la Seguridad y la Recomposición Social, Política y Económica del estado.
Esta exigencia la inició el diputado Gonzalo Guizar Valladares, presidente de la Comisión de Asuntos Migratorios, quien -desde su curul-, advirtió que el clima de violencia y barbarie delincuencial ha rebasado ya al gobierno de Javier Duarte de Ochoa.
Consideró que el asesinato de la periodista Anabel Flores Salazar y la ejecución e incineración de los 5 jóvenes levantados por policías estatales, son ya apenas la punta de una situación ya insostenible para los veracruzanos.
Guízar consideró que en forma colateral al envío de un Comisionado que releve urgentemente en sus funciones al gobernador Javier Duarte, dirigentes políticos, candidatos que participarán en el proceso electoral de junio de este año y personajes de la sociedad civil, así como organizaciones estatales, nacionales e internacionales, deben participar en la integración de una Comisión de la Verdad para Veracruz
El desastre en que ha sumido a Veracruz el gobernador Javier Duarte, con profundas afectaciones a los Derechos Humanos y el evidente desvío o mal uso de los recursos públicos, requerirá de esta Comisión, dijo, para recomponer no sólo el tejido social, sino para iniciar la reconciliación en la entidad.
Este llamado lo reiteró minutos después el diputado Virgilio Caballero, quien a nombre de la fracción de Morena, repudió el secuestro y ejecución de la periodista Anabel Flores Salazar y pidió no criminalizar el ejercicio periodístico en Veracruz.
Junto con este llamado los diputados de Morena desplegaron en la tribuna de San Lázaro las fotos de 19 periodistas asesinados en lo que va del sexenio de Duarte.
“Llegó el momento de que actúe como Jefe de Estado ante la crisis de Veracruz, y deje de operar como ‘tapadera’ del gobernador Javier Duarte, aunque sea de su mismo partido…
“Creemos que el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, debe responder formalmente a la exigencia de que se declare a Veracruz en situación de emergencia ante la crisis de inseguridad que viven los más de 7 y medio millones de veracruzanos…
“Ante este contexto de amenazas, persecución, asesinato de periodistas, violación de Derechos Humanos y una acción sistemática para eliminar a periodistas de forma impune y solapada por el gobierno de Duarte, exigimos una respuesta inmediata del presidente Peña Nieto…
“Criminalizar a los compañeros asesinados es una estrategia realmente cobarde por parte de quienes están obligados a investigar y no a fabricar pruebas en contra de quienes no pueden rebatir las calumnias de este mal gobierno.
“Exigimos que paren esta estúpida masacre que han ejecutado en contra del periodismo en Veracruz de parte de este desgobierno. Que paren esta pesadilla que todos ustedes están provocando en toda la entidad veracruzana”, subrayó Caballero.
Sobre el mismo tema, el panista Jorge López Martín indicó que “hoy Javier Duarte se ha convertido en el ‘enemigo público número 1’ de los comunicadores. No debemos acostumbrarnos a la violencia ni permitir que los periodistas sean perseguidos y hostigados por los gobernantes…
“Hacemos un llamado al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong para que en su calidad de Jefe del Gabinete presidencial intervenga y ponga orden en Veracruz”.
La diputada blanquiazul María Verónica Agundiz Estrada, quien dijo haber trabajado en la radio y televisión como conductora, expresó a nombre de su fracción la solidaridad de los legisladores hacia los familiares de Anabel Flores y de los de todos los periodistas que han sido ejecutados y secuestrados durante el gobierno de Javier Duarte.
Pronunciamientos similares fueron hechos por los diputados del PRD y de movimiento Ciudadano.