Además “demandamos establecer acciones urgentes que garanticen la seguridad de las y los habitantes de Morelos, en particular para hacer efectiva la alerta de violencia de género decretada por la Secretaría de Gobernación para ocho municipios del estado”, declaró la diputada Maricela Contreras Julián.
“Es un crimen que muestra la realidad sobre la violencia que existe en el país y el activismo del narcotráfico en hechos delictivos que pretenden ejercer control en distintas esferas, en todos los niveles de gobierno. Hasta hoy, las acciones para atender esta problemática no han tenido resultados satisfactorios, por lo que consideramos que el asesinato de Gisela Mota es un fuerte llamado de atención y se convierte en un ícono para revisar los esquemas de la política de seguridad de las autoridades federales, estatales y municipales, además de ahondar en una coordinación efectiva que detenga los altos índices de riesgo que atentan contra toda la población”, recalcó la legisladora.
Este no es un hecho aislado, considera Contreras Julián, pues es una de las repercusiones de violencia política que enfrentan las mujeres en nuestro país, al negarse una cultura política e institucional de aceptar que las mujeres cuentan con las capacidades suficientes para ocupar cargos de toma de decisiones y realizar acciones que transformen la realidad de las comunidades, de los pueblos, de los barrios, de las colonias, de los municipios y del país entero.
“Inevitablemente se enmarca en la constante violencia de género que padece la entidad y en la ola de feminicidios que se han suscitado, pues en agosto de 2015, Temixco fue incluido en los ocho municipios de Morelos en los que la Secretaría de Gobernación declaró la Alerta de Violencia de Género por el alto índice de feminicidios ocurridos en los últimos años, sin que las autoridades federales o estatales hayan realizado acciones claras o contundentes para detener esa ola de violencia”, acotó.
Sin embargo, el crimen de la presidenta municipal de Temixco se suma a una atroz realidad en México, pues tan sólo en diez años la Asociación de Autoridades Locales de México reporta que han existido atentados contra 100 presidentas y presidentes municipales en todo el país y contra cerca de mil funcionarias y funcionarios municipales.
Durante su discurso de toma de posesión como presidenta municipal el 1o de enero de 2016, fue enfática en rechazar la corrupción dentro de la administración de gobierno, aplicar la ley con firmeza, crear un gobierno cercano a la ciudadanía a través de una política comunitaria que elevara las condiciones de vida de las personas y no dejar que la violencia e inseguridad se apoderaran de las riendas del gobierno municipal.
“Gisela Mota empezaba a realizar ese trabajo y planeaba con su gobierno atacar los problemas de raíz y de fondo, situación que no fue compatible con los intereses económicos de la clase política local que sólo se ha beneficiado de la delincuencia e inseguridad para sus intereses personales”, finalizó Contreras Julián.