La empresa italiana Eni International ganó un contrato para extraer crudo y gas en la mayor de las cinco áreas propuestas, que incluye los campos de Amoca, Miztón y Tecoalli en aguas someras del Golfo de México.
Para el área contractual uno, la compañía presentó una propuesta de un 83.75 por ciento de participación del Estado en la utilidad operativa, muy por encima del 34.8 por ciento que era el mínimo establecido por el Gobierno.
Los tres campos tienen en conjunto reservas probadas (1P) de 55.6 millones de barriles de crudo y 32.9 miles de millones de pies cúbicos de gas (mmmpc), de acuerdo con datos del regulador, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
El área contractual dos fue adjudicada a un consorcio liderado por la firma argentina Pan American Energy, que presentó una oferta de un 70 por ciento de participación del Estado en la utilidad operativa frente a un mínimo exigido de 35.9 por ciento.
El consorcio incluye también a la también argentina E&P Hidrocarburos y Servicios.
El campo Hokchi tiene reservas probadas (1P) de 19.5 millones de barriles de crudo y 9.2 miles de millones de pies cúbicos de gas (mmmpc), de acuerdo con la CNH.
La Comisión adjudicó a la estadounidense Fieldwood Energy, en consorcio con la mexicana Petrobal, el área contractual 4, con una oferta de 74 por ciento de participación estatal frente al 33.7 por ciento que fijó el Gobierno.
Las subastas del área contractual del campo Xulum y la de los campos de Misón y Nak fueron declaradas desiertas.
La Ronda Uno es el resultado de una ambiciosa reforma energética puesta en marcha el año pasado con la que el Gobierno de Enrique Peña Nieto se propone elevar la alicaída producción de México, el décimo productor de crudo del mundo.