A un año de su desaparición y con el reconocimiento de la deuda que las instituciones del Estado mexicano tienen con los familiares de los 43 desaparecidos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, el senador consideró que la indignación y el dolor deben convertirse en acción positiva.
Gil Zuarth manifestó su respaldo a los padres y amigos de los normalistas, y conminó a las autoridades a dar respuesta puntual y satisfactoria.
“El Congreso tiene también deberes que aportar: debe concretar en el corto plazo un marco jurídico eficaz para prevenir y sancionar las desapariciones forzadas y en manos de particulares, así como una reforma profunda a la ley de víctimas”, apuntó.
Es urgente, abundó, avanzar en un nuevo modelo de seguridad pública para que México cuente con policías dignas, confiables y profesionales que protejan efectivamente a los ciudadanos.
“La búsqueda debe seguir hasta dar con cada uno de los muchachos. Las investigaciones deben continuar hasta castigar al último de los responsables. La asistencia internacional debe mantenerse hasta dar con la verdad objetiva”, agregó.
Luego de la marcha por el primer año de la desaparición de los jóvenes, llevada a cabo la tarde del sábado, Gil Zuarth condenó que un grupo de encapuchados aprovecharan el momento para causar daños y alteraciones al orden público.
“Condenamos a quienes usan el dolor y la indignación de los padres para alterar el orden público. La exigencia pacífica de los padres no debe ser usada por un grupo de violentos que no tienen más causa que el desorden”, sentenció.
