Acompañado por el gobernador de Yucatán, Rolando Zapata Bello, el titular de la SEDESOL destacó que el Programa de Conversión Social resulta de una alianza entre órdenes de gobierno con la finalidad de dar un impulso a los proyectos que instrumentan las organizaciones de la sociedad civil.
Meade Kuribreña sostuvo que los gobiernos federal, locales y la sociedad civil debemos trabajar juntos para hacer de nuestro país un México incluyente. Afirmó que el diálogo con las organizaciones es fundamental, ya que “nos invita a trabajar mejor en la construcción de un México mejor”.
En el evento se destacó que en Yucatán, en los últimos tres años, se ha logrado brindar apoyo a más de 200 proyectos de organizaciones civiles.
María Angélica Luna Parra, titular del Instituto Nacional de Desarrollo Social (INDESOL), señaló que Yucatán cuenta con una sociedad civil fortalecida y ocupada en mejorar la calidad de vida de la población. Dijo que, en 2012, el estado contaba con 377 organizaciones inscritas en el Registro Federal de Organizaciones de la Sociedad Civil. Hoy, dicha cifra se ha elevado a 499 organizaciones registradas, lo que representa un incremento del 33 por ciento con respecto al nivel nacional.
El programa de Coinversión Social, del Instituto Nacional de Desarrollo Social, promueve y fortalece la participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil en acciones de desarrollo social que beneficien a personas en situación de pobreza o vulnerabilidad.
Dicho programa se basa en el principio de corresponsabilidad, a través de un esquema de coinversión, en el que se suman recursos gubernamentales y de actores sociales para impulsar proyectos específicos.
Por otra parte, el secretario Meade y el gobernador Zapata fueron testigos de la firma de un convenio suscrito entre el gobierno del estado de Yucatán y Liconsa. A través de dicho acuerdo, esa entidad podrá adquirir leche fortificada Liconsa a precio preferencial para los Comedores Bienestar. De esta forma, dichos espacios podrán convertirse en puntos de venta de productos de esa empresa social a precios accesibles, con descuentos que oscilan entre un 40 y 50 por ciento respecto a precios de productos de calidad similar en el mercado.
Héctor Pablo Ramírez Puga, director general de Liconsa, señaló que este tipo de convenios fortalecen el Programa de Abasto Social y permiten ampliar el padrón de beneficiarios a través de los cuales se brinda asistencia a la población con carencia alimentaria.
Los Comedores Bienestar, programa que impulsa el gobierno de Yucatán, están destinados a brindar apoyo alimentario a personas de escasos recursos que reciben ayuda a través de programas federales y locales.
En Yucatán, cerca de 50 mil personas reciben atención por parte de Liconsa a través de 226 lecherías distribuidas en diversos puntos del estado. Esto permite brindar un producto fortificado y vitaminado a la población de escasos recursos.