“Venimos a verificar personalmente, vamos a ir a todos los lugares que estén en esta zona para verificar con el personal, vamos a preguntarles a los gerentes o quienes estén como responsables en ese momento para verificar los rumores y si en su caso se da la extorsión, invitarlos a que denuncien”, declaró el funcionario.
En su visita, Ríos Garza se acercó con los empleados de algunos establecimientos localizados en las calles Tamaulipas, Michoacán y Cadereyta, preguntándoles sobre la situación en la que supuestamente están viviendo, sin embargo en cada uno de los locales los encargados señalaron que no existe y que no han sido víctimas sobre este tema.
El funcionario comentó que no es un operativo permanente, más bien fue una visita derivada de las denuncias realizadas a través de los medios de comunicación que se realizará durante estos días.
“Venimos porque era importante escuchar de viva voz a los encargados de los lugares si eran víctimas de este delito, vimos que no es así; por supuesto continuará la vigilancia normal que se tiene por parte de la SSPDF y de la PGJDF, no como un operativo permanente, si no la que normalmente existe”, continuó.
En el despliegue policíaco que se lleva a cabo en la zona, desde el día de ayer participan más de 120 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (PGJDF) y 300 Policías de Investigación de la Procuraduría capitalina.
El procurador Ríos Garza indicó que el delito que se tiene registrado principalmente en la zona es el robo a transeúnte sin violencia, la Coordinación Territorial Cuauhtémoc 7 ha iniciado 80 averiguaciones previas por este delito en lo que va del año.