El desalojo del bloqueo que ayer mantenía la Ceteg en Acapulco y la muerte de un profesor jubilado, provocó manifestaciones de protesta en al menos cuatro entidades.
El bloqueo de la Autopista del Sol fue la culminación de una marcha en la ciudad de Chilpancingo.
En la ciudad de Oaxaca marcharon unos dos mil profesores de la sección 22 del sindicato magisterial, afiliados a la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) y jóvenes pertenecientes a la Coordinadora Estudiantil Normalista del Estado de Oaxaca (Ceneo).
Más de 600 normalistas y miembros de la CNTE se manifestaron en Morelia por los acontecimientos en Guerrero.
Los normalistas llegaron a Morelia a bordo de seis autobuses de las líneas Occidente y Parhikunique. Apenas habían entrado a la ciudad bloquearon la tienda comercial Walmart y el Cinépolis durante una hora 30 minutos. Después marcharon hacia el centro histórico.
En tanto, un grupo de maestros se plantó frente al Congreso de Michoacán, siempre en protesta por el desalojo y la muerte del profesor jubilado Claudio Castillo Peña.
Los profesores michoacanos también levantaron sus propias demandas, como incrementos salariales, pagos de prestaciones pendientes, contrataciones y apoyos extraordinarios.
Los normalistas ayer incendiaron llantas frente a las oficinas del Ejecutivo estatal, conocidas como Casa de Gobierno.
En el DF un centenar de integrantes de la CNTE marcharon hacia la Secretaría de Gobernación, en repudio a la acción policial en Guerrero.
Integrantes de la CNTE anunciaron que, en respuesta al desalojo de Acapulco, radicalizarán sus protestas, pero esto se hará en las aulas.
En el plantón que mantiene la CNTE en el Monumento a la Revolución, la dirigencia del magisterio disidente indicó que las agresiones contra los uniformados en Acapulco fueron provocadas por “un grupo de infiltrados”.
