“Estamos en una crisis nacional como la que enfrentamos hace 20 años”, dijo.
Subrayó que la economía está en picada y la crisis de credibilidad en las instituciones está en sus máximos históricos, lo mismo que la injusticia y la falta de respeto a las garantías de los ciudadanos.
Agregó que la más reciente muestra del doble discurso del gobierno federal fue el tema del salario mínimo.
Aseguró que esto “se expresó en el estratégico bloqueo en el Senado, por parte de legisladores afines al presidente Enrique Peña Nieto, a la iniciativa para desvincular el salario como referencia de pagos, multas y otras obligaciones legales, a unos cuantos días de realizarse la reunión de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, que establecería el aumento para 2015”.
“Imaginemos la situación que se hubiera dado con la reforma aprobada por ambas cámaras (en San Lázaro ya lo hicimos)”, expuso la diputada panista.
Sostuvo que “los comisionados tendrían que haber empleado otros argumentos para justificar el miserable aumento del 4.2 por ciento, cuando ellos conocen, por las propias cifras que tiene el gobierno, a partir de estudios del INEGI, que son alrededor de siete millones de jefes de familia que estando en un empleo formal no ganan lo suficiente ni para comprar los alimentos de la canasta básica para su familia.
“El aumento no refleja un beneficio para la recuperación del poder adquisitivo que se ha perdido”, agregó.
Zavala Peniche sostuvo que lo ocurrido en 2014 “tiene a México en una situación desastrosa, que hasta el momento la falta de actuación en tiempo y forma y la carencia absoluta de sensibilidad para tratar el lamentable caso de los estudiantes de Ayotzinapa tienen al Ejecutivo federal en uno de sus peores momentos de credibilidad”.
Subrayó que “la injusticia (en el caso de Ayotzinapa) se mantiene al no haber podido expresar, al menos no públicamente hasta ahora, no sólo qué fue lo que en realidad pasó, sino por qué ocurrió y cómo serán sancionados los responsables y a final de cuentas reparar el daño ocasionado a las víctimas y garantizar que no se repita en ningún otro lugar de México”.
Sobre la situación de la economía nacional, dijo que no se vislumbra una mejoría en el crecimiento económico.
Añadió que las cifras que ha presentado el gobierno sobre el crecimiento del empleo formal sin crecimiento económico no tienen ni pies ni cabeza, salvo que estén “jugando con los números” y que las regularizaciones se estén contabilizando como empleos nuevos.
“Es claro que el 2014 ha sido muy complicado y que el 2015 lo será mucho más, particularmente por las campañas políticas”.
Dijo creer “que el partido en el gobierno le está apostando a la pérdida de memoria histórica de la gente para conseguír sus objetivos electorales el próximo año”.
Zavala Peniche expresó que en el ámbito legislativo le han dado a México el marco legal para crecer, tanto en lo económico, lo social y también en lo político.
Sin embargo, aseveró, “hasta hoy no vemos que el Ejecutivo haga su parte para garantizar la ejecución de las reformas, tal es el caso de la reforma educativa que a pesar de ser una de las primeras en aprobarse, hasta hoy no han podido implementarla en todo el país; muy al contrario la reforma fiscal, a la que nos opusimos, está afectando desde la clase empresarial hasta el pequeño contribuyente, lo señalamos en su momento y hoy vemos los efectos negativos de esa reforma”.
Hizo un llamado “al gobierno federal y legisladores del PRI a no tener miedo a la fiscalización social, a combatir verdaderamente la corrupción, terminar con la violencia y hacer de México un país fuerte; la sociedad hoy exige más y no debemos permitir que las instituciones pierdan credibilidad y no estén al nivel que los ciudadanos exigen”.
