El mandatario y su equipo no podían confiar más en el gobernador Aguirre, sobre todo cuando estaba en marcha un creciente reclamo e indignación nacional e internacional.
Al quitarle la investigación del caso a Aguirre, el presidente Peña Nieto dejó en claro que no iba a dejar a nadie más que a uno muy probado de los suyos, como Murillo, el esclarecimiento irrefutable de lo realmente ocurrido en Iguala.
Y eso ocurrirá caiga quien caiga. Al parecer el primero en caer será Aguirre. El alcalde José Luis Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa ya no tienen alternativa. Sus vínculos con el minicartel de los Guerreros Unidos está más que probado.
Pero hay indicios de que Aguirre mantenía una relación muy cercana con ambos, quizá más con la esposa de Abarca.
Si cuando estos sean detenidos se revela que el alcalde y su esposa eran correa de transmisión de más que amistad con Aguirre, podríamos estar viendo al primer gobernador en funciones que va a la cárcel no sólo a la banca del desempleo.
Lo cierto es que Peña Nieto no va a exponer todo su proyecto de Gobierno y su posición en la historia, por un gobernador.
Por lo pronto los mensajes que advierten que de uno de los principales consentidos del Gobierno Federal, Aguirre ha pasado a ser un repudiado del régimen, son muy claros:
–El primero fue el lunes anterior cuando el presidente Peña Nieto tuvo que dar un mensaje de indignación desde el Patio de Honor de Palacio Nacional y tomar la decisión de mandar a Murillo Karam a Guerrero a hacerse cargo de la investigación.
–El segundo cuando el fin de semana pasado el presidente del CEN del PRI, el exgobernador mexiquense César Camacho dijo que Aguirre no podía renunciar ni irse en este momento, “porque él es corresponsable”. Una declaración muy contundente que el gobernador no pudo ni debió pasar por alto.
–El tercero cuando Murillo Karam, que encabeza la investigación del caso y la relación con los familiares de los 43 normalistas desaparecidos, desmintió a Aguirre quien había dicho que los cuerpos hallados en las 10 fosas clandestinas no eran de los estudiantes. El Procurador General de la República respondió: “No sé en qué se base… yo cuando dé información será porque tengo la certeza de que así fue”, indicó.
Alejado de la investigación por decisión de Peña Nieto, el gobernador Aguirre anduvo la semana pasada urgido de una señal que le diera certeza de que no va a ser removido del cargo.
Primero propuso que el INE organizara un referéndum para que los guerrerenses dijeran si se queda o se va. La intención era obvia: arrebatarle esa decisión al presidente Peña Nieto.
El propio presidente del INE, Lorenzo Cordova le dijo que su propuesta era inviable, porque el tiempo de un proceso electoral, el INE no puede organizar ningún otro evento. Y el proceso electoral federal de 2015 comenzó justamente el martes 7 de este mes de octubre.
Luego Aguirre multiplicó sus eventos e inauguraciones donde ciudadanos ofrecieron “espontáneamente” su apoyo al gobernador.
Luego sobrevino su comentario de que los cuerpos de las fosas clandestinas no son de los normalistas y la respuesta inmediata de Murillo, quien en los hechos acusó a Aguirre de boquiflojo e imprudente, de querer adelantarse al anuncio que deberá hacer esta semana el procurador General de la República, es decir, el Gobierno de Peña Nieto.
Todo esto –más lo que surja en las siguientes horas-, coloca a Aguirre fuera de la gubernatura y quizá a un paso de la ser imputado junto con el alcalde y su esposa.
MURILLO INFORMARÁ
Por lo demás, las movilizaciones y reclamos nacionales y extranjeros, pero sobre todo la dura y creciente reacción de los grandes medios internacionales –que algunos comienzan a señalar como una “campaña” contra México-, obligarán al procurador Murillo a dar una explicación pronta y a fondo.
Algo que por otro lado no será extraordinario, porque a estas alturas ya hay una treintena de detenidos y confesos de los hechos. Al parecer el procurador General de la República sólo espera algunos de los resultados de los análisis genéticos de los cuerpos encontrados en las fosas clandestinas.
INACEPTABLES VACIOS DE AUTORIDAD
Por si todo lo anterior estuviera fuera de tiempo y foco, no podemos dejar pasar los pronunciamientos del propio presidente Enrique Peña Nieto ante 28 gobernadores reunidos para celebrar el 47 encuentro de la Conferencia Nacional de Gobernadores en Aguascalientes.
Ahí Peña, luego de ponderar la representatividad y pluralidad de esta agrupación, y de reconocer la madurez política y democrática alcanzada en el país, sin darle vueltas, abordó el caso Iguala, pero sobre todo para advertir la falla en que incurrió el gobernador Ángel Aguirre:
“Es inaceptable que en un Estado democrático de derecho, como México, pueda haber localidades con vacíos de autoridad y, peor aún, con vínculos de complicidad entre gobernantes y delincuentes.
“Ante los dolorosos e inaceptables hechos de violencia en contra de jóvenes estudiantes en el Municipio de Iguala, Guerrero, el Gobierno de la República está asumiendo su responsabilidad para esclarecer el caso, y hacer que los culpables, todos los culpables, materiales e intelectuales de estos actos inhumanos y de barbarie, respondan ante la ley.
“Estamos trabajando con determinación y estricto apego a derecho para que no haya impunidad y se haga justicia”, advirtió.
Por cierto, Aguirre fue uno de los 3 gobernadores ausentes en ese encuentro.
Luego, en previsión de que algunos otros de entre quienes se encontraban ahí pudieran incurrir en vacíos de autoridad como en el que cayó Aguirre, el presidente Peña Nieto agregó:
“Como Estado mexicano tenemos que actuar con responsabilidad institucional e ir más allá de la resolución de este indignante caso en particular.
“Debemos acelerar y profundizar las medidas estructurales necesarias para que la ley y la justicia imperen en toda la geografía nacional.
“Lo primero, lo elemental, es contar con corporaciones de seguridad profesionales y, ante todo, confiables”, precisó.
Por eso les pidió no aflojar el pasó. De entrada hay que impulsar la profesionalización y el fortalecimiento de sus cuerpos de policía, les dijo y en “el corto plazo, es indispensable que cada orden de Gobierno y cada autoridad asuman, también, mayor responsabilidad y compromiso.
“La corresponsabilidad no es justificación para la omisión o la suplencia. Al contrario, es un compromiso que exige lo mejor de cada instancia.
“Ésta es la convicción que tiene el Gobierno de la República ( o sea, la deél mismo), para hacer equipo con los gobiernos estatales, y mejorar juntos la calidad de vida de todos los mexicanos”.
SE ACABÓ LA AMISTAD
Por todo lo anterior queda claro que la amistad mostrada de Peña Nieto hacia Aguirre en los dos años anteriores, se acabó.
El gobernador no hizo su tarea. Se apoltronó en el poder estatal y el ataque, asesinato y desaparición de los normalistas acabaron con su buena relación que había hecho que Peña Nieto fuera constantemente a Guerrero.
¿Cuánto más va a durar Aguirre en la gubernatura?
Tal cómo pintan los hechos, quizá días.
