A las tiendas denominadas SuperISSSTE, otrora opción de compra de ahorro para trabajadores al servicio del Estado y población en general, los gobiernos federales panistas las orillaron a una muerte lenta, dos de ellas desaparecieron, y reportan “mermas” de hasta mil millones de pesos anuales.
En una más de las pasadas autoridades del ISSSTE, se adjudicó directamente un contrato por más 207 millones de pesos para rentar ambulancias de traslado por tres años, a pesar de que con esos recursos pudieron comprar 296 unidades a un costo de 700 mil pesos cada una.
Luego de salir casi corriendo del ISSSTE por un fraude y quebranto de 299 millones de pesos al pagar un inventario, sin realizarse, en 2010 cuando era responsable de Finanzas del instituto, el ex director del ISSSTE, Jesús Villalobos López, fue inhabilitado 10 años.
Fuentes del Instituto aseguran que las tiendas SuperISSSTE han sido saqueadas durante muchos años por servidores públicos a cargo de esas áreas, además de una mala administración de los recursos públicos. Oficialmente se reconoce una “merma” de mil millones de pesos anuales en las 350 tiendas.
Los trabajadores rechazan tener responsabilidad por esa situación, pues en esos establecimientos ha habido de todo, desde los servidores públicos que piden el diezmo al proveedor para que entre su producto a los anaqueles hasta negar su entrada por falta del “entre”.
En una reunión con empresarios, el entonces titular del ISSSTE Villalobos aceptó que las 350 tiendas a nivel nacional tenían una “merma” de mil millones de pesos al año, por eso el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) consideró a los SuperISSSTE como un “mal negocio”, por lo que consideró que las autoridades deberían pensar en no realizar actividades que no les corresponden y desaparecerlas; se fundaron cuando la “economía era cerrada” y su objetivo era regular los precios y servir de ancla, según dijeron los financieros en ese encuentro.
Antes de terminar el sexenio panista de Calderón, las autoridades del ISSSTE desataron terrorismo laboral al filtrar que las tiendas SuperISSSTE iban a desaparecer y ofrecieron a ISSSTE asegurador alguno de los predios propios para ocuparlos con instalaciones médicas u oficinas, denunciaron trabajadores que prefirieron el anonimato. Recordaron que los panistas se cerraron los SuperISSSTE de Ticoman y Salto del Agua en el DF.
Los trabajadores argumentaron sobre opinión de los empresarios de cerrar esas tiendas, que los establecimientos del ISSSTE no pueden desaparecer, porque está estipulado en las condiciones generales de trabajo, e informan que a raíz de los sismos de 1985 todas las tiendas se abrieron al público en general, a fin de que se ha beneficiaran con los mejores precios que ofrecían en el mercado.
Niegan que haya una competencia desleal con las tiendas de autoservicio del sector privado como lo comprobó la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en una visita realizada a sus tiendas para comparar los precios.
El SuperISSSTE Zaragoza, en donde en menos de dos kilómetros lineales sobre calzada Ignacio Zaragoza hay mínimo tres Bodegas Aurrerá del Grupo Walmart, los mismos empleados de la tienda observan una muerte lenta del establecimiento por la falta de mercancía de marcas líderes, algunos precios elevados y pocos consumidores, quienes recuerdan que hace 20 años la tienda estaba a reventar los viernes.
Y es que todo se le ha juntado a ese establecimiento, a decir de los empleados de base, pues, explican, algunas marcas líderes como Nestlé y Mabe de México, dejaron de surtir sus productos debido a que no les paga el Sistema Integral de Tiendas y Farmacias ISSSTE (SuperISSSTE) al estar descapitalizado por los millones de pesos que le adeuda ISSSTE asegurador, al cual le surtió sus recetas de medicinas cuando carecían de ellas en las farmacias de sus clínicas, y por otro lado, meten mercancía de marcas patito de procedencia china que nadie compra.
Parece que todo está hecho al propósito para desaparecer una de las principales tiendas de su cadena comercial, ya que poco a poco han desaparecido productos de sus anaqueles y los existentes, a veces son más caros en comparación con otros centros comerciales, y llama la atención de que hay más elementos de vigilancia que consumidores en la tienda. Un dato más: de las 19 cajas de cobro, solamente están abiertas cinco en un viernes por la noche.
Los trabajadores dicen todavía hay clientes leales como los pensionados, quienes se quejan de la falta de productos en la tienda y podrían también ser perjudicados si se cerrara el establecimiento, debido a que gozan de 10 por ciento de descuentos en cada compra. Por eso confían en que el gobierno federal priísta saque adelante a su tienda si designan a un buen administrador en el Sistema Integral de Tiendas y Farmacias ISSSTE.
El dirigente de la FSTSE y senador priísta, Joel Ayala Almeida aseguró que no habrá despidos en caso de cierre de alguna tienda comercial del ISSSTE, porque, añadió, “las que no operen deben desaparecer”.
Al referirse a las pérdidas de mil millones de pesos anuales en esos establecimientos, reconoció que ha habido un saqueo de muchos años y a las autoridades les corresponde intervenir e impedir esa situación.
RECUADRO
SIN FALTAR LOS AVIADORES EN EL ISSSTE
Los trabajadores reportan que la tienda del ISSSTE Zaragoza tenía un total de 300 trabajadores de base, ahora son 70 y personal de confianza 68, y se cuenta con cinco subgerentes, de los cuales cuatro laboran en la tienda y otro al parecer es un aviador.
CONCESIONARIO DE ESTACIONAMIENTO DEL ISSSTE ADEUDA MILLONADAS
De las mermas millonarias en las tiendas del ISSSTE, una parte de ellas se podría ubicar en el estacionamiento concesionado a la empresa Menefer SA que entró en pleito con el instituto desde hace varios años. Ni paga y sigue cobrando por el servicio y hasta noviembre adeudaba al ISSSTE siete millones 918 mil 805 pesos.
